sábado, 18 de junio de 2011

Seminario de profundización

¿Cuál es el compromiso de la institución educativa con la formación de nuevas generaciones y la producción de conocimiento propio? 

Principalmente la labor más importante de la institución educativa en esta nueva generación de avances y saturación de información, es integrar a los niños y jóvenes con esta era tecnológica de forma educativa y que esta le sea de provecho para su plan de vida. La esencia de las instituciones es crear competencias entre los estudiantes y el mundo actual, ya que es este donde van a desarrollar su conocimiento y aprendizaje que han adquirido, esto fuera de una institución. Los planteles educativos deben ofrecer y crear herramientas que faciliten a los estudiantes el desarrollo en el mundo real, esto para que el impacto al experimentar en su nuevo entorno no sea traumático para ellos. Es la parte donde se debe aprender a vivir, donde se debe aprender hacer y a desenvolverse en situaciones diferentes, aprender a entender a otros y aprender a expresar su opinión y a formar su carácter.

Las instituciones educativas se deben comprometer a ofrecer un a educación de calidad, una educación que sirva para la vida de los jóvenes que salen como bachilleres, las instituciones deben enfatizar su proyecto institucional no solo a los saberes básicos, sino a enseñar a los jóvenes a disponer de ellos en su vida, ya que este paso por el colegio se hace tan corto en el momento que se encuentra frente a la sociedad y su caos.        

Definitivamente lo que se debe hacer es minimizar los riesgos del rechazo de uno de nuestros estudiantes cuando este ingrese a una sociedad; a veces es inevitable esta experiencia, pero lo que se quiere conseguir es que todos los individuos que algún día tomaron una clase con nosotros, cual quiera que sea esta le haya sido de utilidad en la actualidad, lo que se espera de ello no es llenar de información un poco de cerebros hambrientos por el conocimiento, más bien se debe pensar en que con nuestras acciones, nuestra propia manera de vivir, con nuestras palabras estas pueden dar un rumbo decisivo a estos nuevos ciudadanos y que posiblemente estos piensen, “fue allí donde aprendí a respetar, a pensar por sí mismo, a actuar de la mejor manera posible, fue donde entendí que mi aporte es un gran aporte, que lo que digo va a ser tomado en cuenta porque lo que digo es dicho por una persona que  piensa antes de hablar”. Es por esta razón por la que las instituciones deben comprometerse con la sociedad y su bienestar.  

Ahora viendo el rol que tienen los establecimientos educativos en una sociedad, se convierte en una función de una política de Estado, donde descansan los pilares de un futuro exitoso, hoy podemos considerar que estas se convirtieron más bien en un jugoso negocio, donde se puede explotar fácilmente a un padre de familia económicamente sin garantía de “producto a recibir” la educación de sus hijos. Es por ello que se ha deteriorado la imagen que se exponía al inicio de este escrito, “la institución educativa que entrega ciudadanos para vivir en una sociedad” hoy se puede entender que están diseñadas como industrias manufactureras que entregan un  esforzado pueblo para el trabajo o mejor dicho para la producción.

Dado lo anterior, es necesario replantear el compromiso de las actuales instituciones educativas, frente a las nuevas generaciones que nos sobrepasan con sus innovadoras tecnologías y la abundancia de información que nos prometen un vasto conocimiento del mundo actual, un conocimiento que nos ayudara a sobrevivir en una sociedad que hoy se considera como productora, es por ello que debemos desempeñarnos en una de estas instituciones, no solo como un maniquí que repite cierto grado de información, obedece rígidamente ordenes de alguien que posiblemente no ha dictado una clase y no enseña a sus estudiantes a tomar decisiones y a desarrollar su autonomía.

Es por ello que los docentes junto no nuestros estudiantes debemos tomar la iniciativa de convertir nuestra institución educativa en una de aquellas que genera conocimientos para la vida y no solamente para la sociedad productora que satisface los intereses de unos pocos. Este es el llamado de una nueva generación para el conocimiento, uno que pueda integrar los intereses morales, sociales, educacionales y económicos que hoy necesitamos para vivir mejor como humanos no como lo que nos consideran hoy “androides de producción de alta calidad”.

Entonces entendemos el porqué de la necesidad de la educación como acción organizada de humanos sobre humanos y la institución tiene mucho que ver con este complejo proceso que contiene un sinnúmero de variaciones que puede dar infinidad de resultados, pero como es algo humano no siempre se debe esperar el mismo resultado, ya que es esto lo que identifica nuestra naturaleza no somos iguales todos los seres humanos, pero es allí donde se encontrara aquellos que algún día nadaron contra la corriente pero hoy son considerados los locos mas inventores del mundo, aquellos que transformaron y fundaron la era actual, estos que una vez les dijeron que lo que decían era imposible, que nunca funcionaria que era una tontería sus teorías, son hoy los padres de infinidad de inventos que nos dan comodidad a nuestra compleja cotidianidad.

Tomando estos genios como ejemplo podemos revolucionar nuestra educación desde nuestras instituciones, no es necesario esperar una ley que nos ordene a enseñar temas con calidad, autonomía e innovadoramente, es por ello que el compromiso institucional prende de todos aquellos que la integramos, este equipo que siempre debe jugar para ganar un punto cada día a nuestro favor.

No hay comentarios:

Publicar un comentario